lunes, 27 de septiembre de 2010

Dark Passion Play - I

Gemma era mi "hermana" (como ya he explicado antes), y creo que si no hubiese sido por ella, hacía mucho que me habría ido lejos. Si la pareja de cada persona es su complementaria, Gemma era todo eso y más. Me conocía mucho mejor que yo mismo, sabía todos mis secretos y todas mis pasiones. Sabía lo que me gustaba y lo que me aterraba. Me quería del mismo modo que yo a ella, y éramos en cierto modo inseparables.

Sí, aunque es cierto que nunca habíamos sido demasiado solicitantes del contacto físico, no lo necesitábamos. No necesitaba estar con ella para saber si estaba triste o preocupada, si estaba feliz o intranquila. Simplemente lo sabía, y supongo que a ella le pasaría lo mismo conmigo.

Físicamente, hubiera resultado casi imposible adivinar que éramos hermanos. Gemma era, sin ser bajita, no demasiado alta. Con rasgos semi-asiáticos y los ojos azules más claros que he visto nunca, su largo y sedoso pelo negro sólo conseguía resaltar su belleza. Poco tenía que ver conmigo, que aunque sí era más alto que ella, tenía la piel más morena (la de ella era muy pálida) y los ojos castaños. Aunque ambos teníamos el pelo oscuro, el mío tenía reflejos castaños y el de Gemma, azules. Era, simplemente, preciosa.


En principio aquel no era un día especial, sino uno como otro cualquiera. Me levanté con la misma pesadez que siempre, y aún sin despertar del todo, me dirigí lentamente al baño. De pronto la puerta se abalanzó sobre mí, pero yo fui más rápido, y aún medio dormido, conseguí esquivarla.
- Ah. Lo siento. Buenos días - dijo el invasor.
- Ya. Buenos días Erick... - sí, se me había olvidado mencionar que aún a mi pesar, dormíamos juntos.
Esa fue toda la conversación que tuvimos durante toda la mañana. Cuando salí del baño me encontré con Gemma, a quien saludé con un cariñoso beso en la mejilla, pero al llegar a mi habitación no había nadie. Tanto mejor para mí - pensé-, no me gustaba demasiado estar a solas con Erick.

Le vi de nuevo durante el desayuno. A esa hora siempre nos juntábamos todos. Gemma y él hablaban en voz baja sobre algo, y Lara miraba su desayuno con la mirada perdida. Siempre se me aceleraba el corazón cada vez que la veía, por mucho que intentase evitarlo. Me senté a su lado.
- Buenos días señorita - estaba preciosa, aún despeinada y con sólo una camiseta ancha para dormir.- ¿Te ocurre algo?
- ¿Qué? No, nada. Tengo sueño, simplemente.
- Ya, y crees que voy a tragármelo.
Ella esbozó esa sonrisa torcida que tanto me gustaba.
- No, es verdad. Estoy bien, no te preocupes.
- Si ocurre algo me lo dirás, ¿verdad?
- Supongo - con eso daba por zanjada la conversación.
Seguimos hablando de cosas triviales durante todo el desayuno, a veces entre los cuatro, otras entre Lara y yo y otras tantas con mi hermana; pero yo nunca hablaba directamente con Erick. Él no me quitó la vista ni un momento. Intuía una bronca, pero no sabía por qué.

Cuando acabamos, las chicas se quedaron abajo y él y yo subimos al piso de arriba. En un silencio tranquilizador, o eso pensaba hasta que él lo rompió.
- ¿Qué, otra vez intentando ligar con mi hermana? - su tono era tan poco amable como siempre que se dirigía a mí.
Suspiré.
- Erick, sabes de sobra que...
- Sé de sobra que por mucho que lo niegues sigues enamorado de Lara - de tonto nunca había tenido un pelo.- No se te ocurra acercarte a ella. Ya tuvo bastante con la primera vez. No sé ni cómo te aguantó durante tanto tiempo...
- Yo no sé cómo te aguanta mi hermana cada día.
Él me miró con odio. Había dado justo en el clavo. Si había alguien que amara más a Gemma que yo, ese era Erick. Creo que era lo único por lo que le estaba agradecido, por cuidar siempre de ella.
- ¿Sabes por qué? Porque yo no soy un cabrón insensible que sólo hace daño a quien ama - dijo secamente. Tras esto, dio un portazo y se encerró en la habitación, encendiendo la música a todo volumen.

Me quedé allí parado, al borde de la escalera, aún con sus palabras resonándome. Había oído hablar a los demás de mí en ese sentido millones de veces, y más refiriéndose a la relación que habíamos tenido Lara y yo, pero las palabras de Erick en ese preciso momento me marcaron para siempre. Y, nunca supe por qué, algo se encendió en mí y entendí que desde ese momento nada sería igual.



(Gemma es igualita a http://vimeo.com/moogaloop.swf?clip_id=6763558&server=vimeo.com&show_title=1&show_byline=1&show_portrait=0&color=&fullscreen=1 *_*)

1 comentario:

  1. disculpa mi torpeza, pero... ¿como has dicho que se llama el protagonista? XD.
    Me encanta. Escribes muy bien y la chica de la foto, es guapisima. Al menos se como quieres que me imagine a uno de los personajes XD
    los demas me los imaginare yo

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